Tras una primera jornada plagada de experiencias en Valetta y Las Tres Ciudades teníamos otro maratoniano día para nuestros cuatro viajeros que también están contando su experiencia por Twitter a través del hashtag #rutaMalta. Esta vez tocaban lugares pintorescos de las tradiciones y el estilo de vida maltés…
Empezaron desayunando prontito y ya estaban preparados a las 8.30 horas para dirigirse a Marsaxlokk, contemplar las barcas de los pescadores (Luzzu), sus colores y también el mercado del pescado. Después ruta hacia Wied Iz–Zurrieq y la caverna marina de Blue Grotto.
Tras la maravilla natural, había que contemplar las arqueológicas y nada mejor para ello que pasear por los templos de Hagar Qim y Mnajdra, parte de las joyas de Malta. Alto en el camino para reponer fuerzas y comer mirando al mar en el restaurante Blue Creek, cerca de Qrendi.
Pero no se podía acabar el día sin respirar la paz de Mdina, la ciudad fortificada y donde dejaron su impronta los romanos y los Caballeros de la Orden de Malta.
Inés comentaba en Twitter qué tal se lo estaban pasando: «Muy bien! Hace calor, estamos viendo acantilados y pueblos preciosos y nos dan muy bien de comer:)»
Seguro que cuando terminen nos enseñan un montón de fotos y nos cuentan todo con detalle. ¿Habrán probado los pastizzi?