La historia recorre Malta de punta a punta. Sus 316km² están salpicados con pequeñas ciudades y pueblos que datan de muchos años. Hoy nos detendremos en una de las más antiguas, Ħaż-Żebbuġ.
Ħaż-Żebbuġ tiene la atmósfera de un pueblo, a pesar de haber sido nombrada “ciudad” por el Gran Maestre de Rohan en el año 1777. Erguido para esta ocasión, la ciudad nos da la bienvenida con el llamativo Arco de Rohan. En el legado histórico de la ciudad destaca la iglesia parroquial dedicada a San Felipe de Agira, patrón de la ciudad, construida a principios del siglo XVII. Su interior es barroco, con una decoración elaborada y cargada. Contiene una magnífica pintura de Luca Garnier y diversas obras de Francesco Zahra, Guifo Reni y Antonio Sciortino. Punto de encuentro de hombres de negocios, Ħaż-Żebbuġ ha sido durante años la principal ciudad agrícola de Malta, y epicentro de la producción de algodón. La prosperidad de sus habitantes ha dejado maravillosas casas patricias y palacios.
Ħaż-Żebbuġ es conocida también por haber sido cuna de varias personalidades maltesas en el campo cultural. Aquí han nacido Nicolás Isouard (compositor), Mikel Anton Vassalli (padre de la lengua escrita maltesa), Antonio Sciortino (escultor), entre varios otros.
El nombre Ħaż-Żebbuġ significa “olivas”, y hace referencia a los grandes olivos que se alzaban en la ciudad, donde hoy está la iglesia y el centro.
Aquellos que os encontréis por Malta este sábado 5 de mayo, tendréis una ocasión perfecta para conocer a fondo Ħaż-Żebbuġ. Se llevará a cabo un festejo en el mercado medieval, en el que se recreará de manera relatada la historia de la ciudad, y donde habrá puestos ofreciendo su comida y artesanías autóctonas.