Akasha en sánscrito significa éter. Y este alusivo nombre insinúa el carácter de la obra así denominada, estrenada ayer en el Teatru Manoel y ofreciendo una segunda función esta noche a las 20hs en la misma sala.
El coreógrafo y bailarín malayo, Mavin Khoo, trae a Malta su concepción sobre el movimiento físico y la presencia, interpretando su obra de danza contemporánea Akasha. La función explora la interacción entre las energías, incluso las almas, dotándolas de una interpretación física y corporal. Indaga en la idea del éter y su pluralidad de interpretaciones: aire, espíritu, energía. La interpretación conecta mortalidad con inmortalidad, cielo con tierra, vida con muerte; una serie de cuestionamientos filosóficos pero que a fin de cuentas se manifiestan en pura danza. Renzo Spiteri ha creado el paisaje sonoro de la obra en la que Khoo bailará junto a dos bailarines y dos actores.
Mavin Khoo dejó su casa a los 10 años, y desde entonces ha vivido, estudiado y trabajado en numerosos sitios alrededor del mundo. Cada paso por cada ciudad y cada parada han contribuido a forjar su estilo profesional y lo han dotado de ese interés y esa penetración en la compleja noción de identidad. “El tiempo que he pasado en Londres ha sido clave para dar forma a esta sensibilidad, especialmente en lo que respecta a la idea de hibridez” relata el coreógrafo.
“La actitud hacia las artes está cambiando” afirma Khoo “los fondos locales están invirtiendo en proyectos y en personas”. En este caso, estos fondos se unieron para la puesta en escena de Akasha. Con el apoyo del Bristish Council y el patrocinio de la Asian Company Paradigm Wellness, la obra debuta en Malta y luego se traslada a Singapur. El Teatru Manoel se presta para recrear esta pieza de ambiente etéreo y misterioso.
Trailer de Akasha: