Si te gusta disfrutar de la buena comida, y estás planeando unas vacaciones en Malta, no pases por alto la oportunidad de organizar una excursión a Gozo (tan sólo a 25 minutos en ferry) y probar las delicias propias de la isla, que ha desarrollado a lo largo de los siglos una identidad propia, que se refleja no sólo en la cultura y arte, sino también, y muy especialmente, en su gastronomía.
Gozo cuenta con una gran escena culinaria, y algunos de los mejores restaurantes de todo el archipiélago se encuentran en la isla, cuyas cartas incluyen sugerencias mediterráneas con toques africanos y europeos.
Una de las especialidades de Gozo es su conocido queso, elaborado con leche de oveja. Ya sea más fresco o curado, suele estar cubierto con especias, como la pimienta. Este queso tan típico es también el protagonista de los tradicionales raviolis gozitano o los célebres pastizzi.
Otros platos típicos de la isla, reservados para las ocasiones especiales son los macarrones al horno (imqarrum) y el arroz al horno (ross fil-forn) y, por supuesto, el conejo, el plato tradicional de las islas maltesas. Si te gusta el pescado fresco, disfrutarás como nadie en los restaurantes gozitanos. No olvides pedir una aljotta, o sopa de pescado con ajo.
Como bien sabes, en la cultura mediterránea el aperitivo ocupa un lugar muy especial en la gastronomía, y en Gozo no podía ser menos. Para abrir abriendo boca mientras llegan los platos, nada mejor que un hobiz biz-zejt, que consiste en una gruesa rebanada de pan y aceite de oliva, con tomates frescos, menta, cebolla, queso de oveja y anchoas. ¡Delicioso!
A lo largo de la isla encontrarás diferentes bares, restaurantes y casas de campo donde degustar las especialidades de Gozo. Merece la pena una visita a Ta’Mena, una hermosa granja en Xaghra, donde se pueden degustar deliciosas especialidades gozitanas, como su famosa salsa de tomate, el queso de oveja, miel, salsas picantes y excelentes vinos.
Otro referente gastronómico de Gozo es Rikardu, quien regenta su negocio familiar en la Ciudadela de Victoria desde hace casi 30 años. Nada más atravesar sus puertas, te encontrarás con una acogedora casa de comidas en la que degustar los platos que Rikardu elabora con productos ecológicos y de cosecha propia. ¡Imprescindible!
