Hoy toca nueva entrega de cocina tradicional. Como sabes, los malteses son amantes de los snacks a base de masa de hojaldre. En alguna ocasión te hemos hablado de los deliciosos pastizzi y su receta y hoy vamos a presentarte los qassatat, similares a los pastizzi e igual de sabrosos. En concreto, vamos a contarte la receta de los rellenos con ricotta, un queso muy apreciado en el archipiélago maltés, dada la influencia con la gastronomía italiana. Toma buena nota de ella y anímate a prepararlos. Con ellos, ¡quedarás genial ante tus invitados!
Ingredientes y preparación de la masa:
500 gramos de harina común
225 gramos de mantequilla a temperatura ambiente, cortada en pequeños pedazos
1 huevo
Una pizca de sal
½ taza de agua
Comenzamos introduciendo la harina, mantequilla y sal en la batidora y dejamos que la masa se trabaje hasta que adquiera una consistencia similar a migas de pan. A continuación, añadimos el huevo y el agua y amasamos hasta que se mezcle bien. Seguidamente, sacamos la masa de la batidora y amasamos de manera manual dándole una forma de bola. La dejamos a temperatura ambiente durante unos 30 minutos.
Ingredientes y preparación del relleno:
500 gramos de queso ricotta
2 huevo
Una pizca de sal
½ taza de queso pecorino gratinado (opcional)
Para preparar el relleno, simplemente juntamos todos los ingredientes y removemos vigorosamente.
Nota: algunas modalidades de ricotta son más cremosas que otras, por lo que, según la que vayas a utilizar, quizá necesites más de un huevo. El relleno no debería quedar demasiado líquido, ya que podría salirse de la masa.
Preparación del qassatat:
Para preparar los qassatat, creamos una especie de rollo con la masa y lo dividimos en dos mitades. Tomamos una de estas piezas y la abrimos (como si estuviéramos preparando una masa de pizza) creando un círculo de unos 5 cm. de diámetro más o menos. A continuación, colocamos un poco de la mezcla de ricotta en el centro. Seguidamente, tomamos la masa desde sus extremos y empezamos a plegarlo todo desde fuera hacia dentro, hasta darle la forma típica del qassatat (similar a una empanadilla china).
Continuamos realizando este procedimiento hasta que hayamos utilizado toda la masa y la mezcla de ricotta. Cuando tengamos todos nuestros qassatat, los untamos con el huevo con ayuda de un pincel y los horneamos a 400 grados durante media hora o hasta que estén ligeramente dorados.
Dejamos atemperar un poco… ¡y a disfrutar!
Foto: www.tal-forn.com