¿Estás planteándote la posibilidad de organizar una escapada otoñal, pero aún no tienes decidido el destino? Nosotros lo tenemos claro: Malta ha de ser tu próxima elección. Si no conoces este pequeño país en el corazón del Mediterráneo, te damos diez buenas razones por las cuales lo has de elegir.
- Su cultura: Malta presume de una cultura muy rica, producto de sus miles de años de historia y de la influencia de los pueblos que han habitado el país, los cuales han dejado su impronta a lo largo de los siglos. Desde los romanos, pasando por los árabes y fenicios, este crisol de civilizaciones se respira en cada rincón, construcción y calle del archipiélago.
- Sus bellos paisajes: La belleza natural de Malta, típicamente mediterránea, permanece intacta incluso durante los meses más fríos del año. Sus aguas, claras y de un intenso azul, y sus acantilados, invitan a ser descubiertos ya sea a pie o en barco.
- Su historia: Como ya te hemos contado, la historia de Malta es tan larga como fascinante y, como prueba de ello, se erigen sus lugares Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO (la ciudad de Valletta, sus siete templos megalíticos y el hipogeo de Hal SaflieniI). A su vez, Malta sabe compaginar a la perfección lo antiguo con lo más moderno. Un claro ejemplo de esta dualidad es la propia ciudad de Valletta, cargada de palacios, templos y callejuelas con siglos de antigüedad, junto con edificaciones más modernas, como el nuevo Parlamento o la City Gate, del estudio de Renzo Piano.
- Su gastronomía: Típicamente mediterránea, la gastronomía maltesa combina sabores orientales, italianos, fenicios e incluso españoles de manera única. Y es que los diferentes pueblos que han pasado por el archipiélago han dejado su impronta en su cocina, dando lugar a deliciosos y sabrosos platos que han de probarse como un “must”, como el conejo estofado, los pastizzis o la ftira.
- Su animada vida nocturna: Como ya te hemos dicho en otras ocasiones en el blog, la vida nocturna de Malta es de lo más animada y su oferta de restaurantes, bares de copas y discotecas, diferentes y para todos los gustos, no deja indiferente a nadie. En Malta, ¡cada noche es especial y única!
- Sus asequibles precios: Para viajar a Malta no es necesario disponer de un presupuesto muy grande. Y es que el destino ofrece alojamiento, transporte y restauración para todos los bolsillos, desde aquellos que deseen viajar como mochileros, con un presupuesto más ajustado, hasta los que se decanten por el lujo y el todo incluido. La comida maltesa goza de una excelente relación calidad-precio y en muchas ocasiones se puede invertir realmente poco a la hora de comer. Por dos euros, por ejemplo, es posible adquirir una porción de pizza de un tamaño considerable. ¡El precio no es un impedimento para viajar a Malta!
- Su buen tiempo: ¿Sabías que, en Malta, hay más de 300 días de sol al año? Con un clima así, ¡es imposible resistirse a la tentación de conocerla! El archipiélago no sólo tiene pocos días de lluvia, sino que también goza de temperaturas muy agradables a lo largo de todo el año, lo que propicia el que pueda ser visitado en cualquier estación.
- Su tamaño: Malta es un país pequeño, por lo que puede ser visitado durante una escapada de unos pocos días. A pesar de tratarse de un archipiélago compuesto por tres islas, las distancias no son largas o pesadas, por lo que es posible conocer todo lo que el destino tiene que ofrecer sin invertir mucho tiempo en los desplazamientos.
- El carácter maltés: El pueblo maltés, muy sencillo, es conocido por su amabilidad y naturaleza tranquila. Así, los locales, amigables y entrañables, siempre estarán dispuestos a acogerte y ayudarte en todo lo que necesites con una sonrisa en sus labios, lo que facilita enormemente la estancia en el país para cualquier turista, además de hacerla más agradable.
- Es un destino muy seguro: Por último, aunque no por ello más importante, destacar que Malta es un país muy seguro, apto no sólo para turistas en solitario, sino también para mujeres viajeras.