Desde el blog de Malta solemos hablarte de paisajes naturales majestuosos que pueblan el archipiélago. Hoy, en concreto, queremos hablarte de un atractivo que, si bien es menos conocido, tiene una historia detrás que es realmente interesante. Estamos hablando de las piscinas de roca que se pueden ver a lo largo de la costa de Sliema, en la zona conocida como Qui-si-sana, así como en el puerto de Marsamxett y la ciudad de Birzebuggia.
Te recomendamos visitar estos enclaves en Malta por dos razones principales: por un lado, por lo originales que son y, por otro lado, porque las piscinas de Sliema han sido escogidas por el famoso medio de comunicación The Guardian como una de las diez mejores piscinas marinas de toda Europa.
Si bien su origen es aún incierto, la construcción de estas piscinas es probablemente atribuible a la época victoriana, período durante el cual la aristocracia británica de los siglos XVIII y XIX definió el concepto del mar como recurso natural para el ocio, además de fuente de innumerables beneficios para la salud.
Lamentablemente, no existen muchos documentos históricos que nos cuenten cómo se disfrutaba del mar en Malta antes de que el archipiélago se convirtiera en un destino turístico tan apreciado. En cualquier caso, tomar un baño en el mar siempre ha sido algo natural en una isla tan soleada como es Malta. Lo realmente revolucionario de estos enclaves fue la creación del concepto de piscina de agua marina; algo que permitía, por un lado, disfrutar al máximo de las propiedades positivas del agua del mar y, por otro, preservar la moral victoriana, al no estar tan expuesto a las miradas ajenas durante el baño. De hecho, aún hoy en día se puede observar en los bordillos de estas piscinas los huecos en los que se encajaban los postes que servían para sostener unos telares que se colocaban para proteger a los bañistas de las miradas indiscretas y, al mismo tiempo, de los rayos del sol.
¿No te parece curioso lo que te hemos contado? Ya sabes: si te apetece darte un baño en Malta en un lugar curioso, no olvides visitar alguna de estas piscinas en roca. Si vas, además, a Malta con niños, no te preocupes, ya que estas piscinas tienen poca profundidad así que los más pequeños te podrán bañar tranquilamente.